Un aliento fresco y dientes sanos es la máxima de los colutorios. Los enjuagues bucales de uso diario pueden ser beneficiosos para la salud bucodental, ya que pueden aliviar la sensibilidad dental, asegurar unas encías sanas, mantener alejadas posibles afecciones e incluso ayudar en la cicatrización de heridas.
Su uso se recomienda después del cepillado, para eliminar las bacterias en áreas difíciles de alcanzar con una limpieza mecánica, durante unos treinta segundos y alrededor de una o dos veces al día, en función de las necesidades del usuario.
Aunque su uso no esté supeditado a receta médica, no debemos utilizarlo ni escoger un tipo u otro sin la recomendación de un especialista. En términos generales, se diferencian tres clases de enjuagues bucales: los estéticos o básicos, aquellos orientados a la eliminación de restos de comida y el mantenimiento de un buen aliento; los antisépticos, que ayudan a controlar la placa bacteriana; y los fluoruros, que protegen a nuestra dentadura de afecciones como el sarro o la caries.
De uso diario
Los enjuagues bucales de uso diario tienen como propósito combatir el mal aliento y la placa bacteriana, así como prevenir la aparición de patologías derivadas de esta. En esencia, buscan ser un refuerzo a la limpieza realizada con el cepillo e hilo dental.
De este modo, encontramos colutorios destinados a usuarios sin afecciones bucodentales y que mantienen una correcta atención a su higiene dental. Estamos hablando de los enjuagues básicos, que pueden ser para encías o dientes sensibles, por lo que contienen muy poca cantidad de alcohol o ninguna, o contra la halitosis.
Por otro lado, nos encontramos con colutorios con alto contenido en flúor, que son más efectivos contra la caries que otras variedades, por lo que se les suele denominar enjuagues anticaries. Por último, los antisépticos, aunque también son efectivos contra esta afección, están más orientados a la eliminación de placa bacteriana y a la cura de pequeñas infecciones causadas por llagas.
De uso limitado en el tiempo
En algunas ocasiones, se recomienda el enjuague con colutorios con clorhexidina. Está indicado, por ejemplo, para pacientes con enfermedades periodontales y también como fin preventivo a una cirugía oral, pero no se recomienda su uso diario debido a sus fuertes propiedades antibacterianas.
Lo mismo sucede con aquellos que contienen hexidina, recomendados solo para acelerar el proceso de cicatrización tras una cirugía. Y, en general, no se aconseja la utilización con frecuencia de los colutorios con alto porcentaje de alcohol.
Asimismo, a los niños y niñas (mayores de 6 y 7 años) más proclives a padecer enfermedades periodontales o caries, se les recomienda el uso de colutorios infantiles. En este grupo se encuentran, por ejemplo, aquellos que están con un tratamiento de ortodoncia fija o que toman medicación de forma habitual, por lo que puede desencadenar en ciertas dificultades en cuanto a segregación salival (antiséptico principal en nuestra boca).
Escojamos un enjuague bucal u otro, lo que debemos tener en consideración es que no es un sustituto del cepillado de dientes, sino un complemento para garantizar los mejores resultados en nuestra rutina de limpieza e higiene.