No hay método más eficaz para saber si los más pequeños de casa sufren alguna afección bucodental que con las visitas periódicas a nuestro dentista. Sin embargo, debemos estar alerta por si se desarrollan patologías tan comunes y habituales como la caries. En la entrada de hoy, hablamos sobre algunos síntomas y signos que nos podrían estar indicando que nuestros hijos la padecen.
El dolor: el signo más común
Los productos azucarados, las bebidas frías o con gas u otros alimentos ácidos, son los grandes enemigos de nuestra salud bucodental. Tal es así que, si nuestros hijos se quejan o dicen tener dolor tras la ingesta de alguno de estos alimentos, podría ser un indicador de caries.
Está claro que debemos limitar el consumo de este tipo de productos en nuestra dieta. En nuestra boca habitan bacterias que forman la placa bacteriana y que debemos limpiar y eliminar. Estas se alimentan de los azúcares que consumimos y que transforman en un ácido que daña el esmalte. Si a ello le sumamos una higiene incorrecta, esto podría acelerar el daño que produce y la aparición de afecciones encabezadas por la caries.
De este modo, si hacemos una exploración en su boca y observamos puntos blancos, marrones o negros, debemos pedir cita con nuestro dentista cuanto antes, tanto si se trata de dientes de leche o definitivos.
Cambios de color durante las exploraciones
Como mencionábamos, no habrá mayor prevención que una visita cada seis meses al dentista y nuestra atenta mirada sobre su boca y rutina de higiene bucodental, la cual, le deberíamos inculcar desde pequeños. De este modo, si durante alguna de las exploraciones rutinarias detectamos que alguna pieza ha cambiado de color, debemos visitar a un especialista.
Otros signos
Aunque el dolor dental, los cambios de color en los dientes o las cavidades de color marrón en los molares son los signos más habituales, la caries también se puede manifestar a través de fracturas dentales, abscesos locales o falta de apetito.
Cinco puntos para evitar la caries
Como es evidente, uno de los consejos más importantes para evitar la caries es mantener una buena rutina de higiene bucodental. Si a esta le sumamos una alimentación equilibrada, el uso de dentífricos con flúor, el sellado de fisuras y la visita periódica al dentista tendremos la clave del éxito para mantener alejada la caries de la boca de nuestros pequeños.