Aunque no hay una fecha exacta para ello, pudiendo ser un poco antes o quizás un tiempo después, los dientes definitivos suelen comenzar a crecer y empujar a los de leche cuando los más pequeños de la casa ya han soplado las seis velas. Pronto, las primeras piezas empezarán a tambalearse y el proceso durará, al menos, hasta los doce años. Si tienes niños en casa tal vez te preguntes qué es lo más ideal: ¿deberías dejar el diente o arrancarlo? ¡Te lo explicamos en este post!
Un diente de leche comienza a moverse porque el definitivo que ocupará su lugar está erupcionando y está destruyendo su raíz. Tal vez sea incómodo para los más pequeños, se quejen al respecto y comiencen a empujarlos con la lengua, pero lo más recomendable es dejar que sigan su curso natural y permitirles a las piezas dentales que caigan por sí mismas. Además, extraer los dientes de leche antes de su momento puede provocar que los definitivos salgan antes de tiempo y crezcan torcidos por no tener el espacio suficiente.
A los cinco o seis años los incisivos centrales inferiores son los primeros dientes en caer. A estos, les siguen los superiores y, más tarde, entre los siete u ocho años, es el turno de los incisivos laterales. A los nueve años suelen caerse los colmillos inferiores y a los once o doce años, los superiores. En la franja temporal en la que caen los colmillos, además, se caen los primeros y segundos molares.
Como recomendación, debemos vigilar el movimiento del diente de leche y el color de la encía. Esta debe tener un color anaranjado y no puede sangrar ni presentarse ninguna mancha en ella. Por otro lado, podemos aconsejar a nuestro hijo o hija que empuje con cuidado el diente con su lengua o ofrecerle alimentos como puede ser una manzana, por ejemplo, para que se vaya aflojando.
Sin embargo, hay más motivos por los que un diente de leche puede moverse como, por ejemplo, caries que destruyen su corona, infecciones del nervio o raíces o malposición dental, entre otros. Asimismo, también se puede dar el caso de que, pasados unos 2 o 3 meses desde que comienza a moverse el diente de leche, este no se cae o que aparece el definitivo por debajo. Si estamos ante alguna de estas situaciones debemos acudir al dentista para que nos recomiende la mejor opción para la salud bucodental de nuestros niños.